A lo largo de la historia de la capital italiana una gran variedad de dioses se han disputado la ciudad así que le proponemos una ruta por la Roma más divina, y recuerda que encuentra las mejores ofertas en esta agencia de viajes online.
Esta ruta podrá comenzarla por el Partenón, el templo dedicado a todas las divinidades, que con el paso del tiempo se convirtió en la Iglesia de Santa María de los Mártires, también es el sagrario de los reyes italianos.
A poca distancia se halla el Foro Romano, que guarda unos templos muy interesantes como el Templo de Vesta, el Templo de los Dioscuros y el Templo de Saturno.
Después de admirar las antiguas religiones, se podrá dedicar a visitar distintas iglesia que se hallan repartidas por toda Roma.
La Catedral de Roma, San Juan de Letrán, se encuentra en el extremo oriental de las Murallas Servianas, también es conocida como la Madre de todas las iglesias. En las proximidades, caminando por la Vía de San Giovanni in Laterano, llegará hasta la Basílica de San Clemente, en cuya portada barroca se guardan muchos tesoros artísticos de la época medieval.
Pasando el Coliseo, y dirigiéndose a la Plaza Esquilino, podrá pararse para contemplar la Basílica de San Pedro en Vincoli, donde observará el conocido Moisés de Miguel Ángel, una obra que transmite vigor y fuerza.
Cerca se levanta Santa María la Mayor, la basílica romana mejor conservada. En la portada se guardan las joyas artísticas más destacadas, principalmente los hermosos mosaicos. También podrá contemplar su Capilla Sixtina, los frescos de los profetas y la Capilla Paulina.
Cruzando el Tíber, podrá hacer una visita a la Basílica de Santa Ceciclia en Tratévere, ubicada en el centro de uno de los barrios más turísticos de la ciudad. Destacando las obras presbiteriales, su famoso bladaquín, el mosaico medieval ubicado en la cúpula, la estatua de Santa Cecilia. Aunque la autentico tesoro de la basílica, se encuentra en el coro de las monjas el Fresco del Juicio universal.
No obstante, esta ruta podrá llevarla a cabo cuando visite la ciudad eterna, pero sin lugar a dudas la Semana Santa es una de las mejores épocas para llevarla a cabo y descubrir el lado más divino de Roma.
