La Villa Romana la Olmeda, es un tesoro con su propia valía, entre las muchas joyas que se hallan en la provincia de Palencia.
Se encuentra por la Carretera C – 615 (de Palencia a Riaño), a 62 kilómetros de la capital palentina, en el desvío situado en el kilómetro 55,00 en Gañinas, hacia la PP – 2420.
Si bien, puede visitar la Villa sin el acompañamiento de un guía ya que existe una ruta recomendada, para simplificar la visita libre. Además, contará con la ayuda de puntos interactivos y paneles que le irán informando. Para una visita grupal guiada (solamente grupos de entre diez a treinta personas), es preciso reservarlo previamente.
La villa, fue descubierta en el año 1968, y es uno de los yacimientos romanos más destacados del mundo hispánico. Era una gran mansión que data del siglo IV (del Bajo Imperio), cuya construcción de planta cuadrada está flanqueada por un par de torres, se dispone en torno a un peristilo y patio central, al que se abren diferentes dependencias, las gran parte de las mismas cuenta con mosaicos.
En el oecus o salo principal se conservan uno de los mosaicos más importantes en que se contemplan diferentes escenas: una la historia en Skyros de Ulises, adornado con una hermosa cenefa de retratos, posiblemente de los dueños de la villa. Siendo el tema principal una cacería con mucho realismo.
En las cercanías de la construcción principal, diferentes necrópolis se han excavado donde se han encontrado material interesante y abundante, para el estudio y descubrir la época tardorromana.
Los baños, forman un espacio distintos en la zona oeste del conjunto. Desde que se descubrieron sean realizadas diversas actuaciones cuyo fin fue su delimitación del completo. Encontrándose cinco estancias
A principios del mes de abril de 1996 fue declarado como Bien de Interés cultural.
En el municipio próximo a la Villa, es decir, Saldaña, se completa la visión de la época romana en el Bajo imperio, visitando el Museo Monográfico, donde podrá contemplar los ajuares funerarios encontrados en la necrópolis, vajillas de cerámica, monedas, herramientas de artesanos y labradores, vasos de tono verde, arreos en bronce de ballos, etc.