A solamente 36 kilómetros de la capital de la provincia, Uña se encuentra en plena Serranía media, se asienta sobre una colina entre la Laguna de Uña y el Júcar, que ofrecen un admirable paisaje. Al visitante le interesará saber que si visita el casco urbano le brindará dos visitas en una, según desde donde lo contemple.
Coge tu cámara de fotos y prepárate para conocer las dos caras de esta localidad, por la vista desde la Laguna contemplarás como el pueblo baja desde la Plaza de la Constitución, en cambio desde la Carretera comarcal 2105 te mostrará una localidad sobre una colina, en que sus viviendas serranas parecen prácticamente colgadas sobre ella. Por medio de las Calles de Las Fraguas y del Horno, podrás contemplar el trazado de estas casas populares muy hermosa.
Disfrutarás del entorno natural que rodea la Laguna de Uña, compuesta por el Caz del río Rincón y el Canal de la Toba, contemplando su fauna, flora y de sus aguas tranquilas.
La laguna y los alrededores de Uña pueden contemplarse desde el denominado Balcón de Uña, ubicado a escasos kilómetros de este municipio manchego. Desde ahí podrá observar el cantil rocoso, que se la conoce como el Castillo de Uña, que guarda a esta localidad de los vientos.
El paisaje de la Hoz de los Cortados y las Sierras de las Valdecabras y Majadas, entre las cuales pasa el río Júcar, forman las vistas más próximas que se guarecen el acceso a la localidad. En el casco urbano sobresale la Iglesia de San Miguel Arcángel, edificada en el siglo XIII y en el siglo XVI remodelado. Es una construcción con espadaña, de mampostería y tejado de madera a dos aguas.
El 16 de agosto se celebran las Fiestas de San Roque, que es una buena oportunidad para descubrir el folclore de la Serranía de Cuenca. Si te gusta la caza, podrás visitar el Parque Cinegético nacional del Hosquillo, que se halla a poca distancia.