Teruel es bien conocido en todo el mundo, como la ciudad de los amantes porque en sus tierras se vivió una historia de amor al más puro estilo de Romeo y Julieta.
La historia apasionada de los Amantes de Teruel, ocurrió en el siglo XIII entre Diego de Marcilla e Isabel de Seguro. Ella era hija única y heredaría uno de los patrimonios más importantes de la ciudad, él en cambio era el segundo varón y no heredaría nada. Por lo tanto, su amor solo llegaría a buen fin si él era capaz de conseguir suficiente patrimonio para tener una dote de acuerdo con la petición de la familia de ella. El padre de Isabel le otorgo un plazo de 5 años a Diego para tal fin, y este se enrolo a las tropas cristianas que luchaban contra los musulmanes. Mientras, Isabel esperaba en Teruel, rehusando las propuestas matrimoniales de los nobles turolenses y calmando los deseos de su progenitor que casarse lo más pronto posible.
Pasaron los cinco años, Isabel no tuvo noticias de su enamorado por lo que se caso con otro hombre, pero al día siguiente Diego llego a la ciudad rico. Al enterarse que su enamorada se había casado con otro, Diego se atrevió a entrar en las habitaciones de los recién desposados, para pedirle a Isabel su primer – último beso. Ella lo rechazo, al ser una mujer casada, y Diego no pudo aguantar el desprecio y murió.
En los funerales, al día siguiente, Isabel se acercó al cuerpo inerte de Diego, y le dio un beso para la eternidad, y murió al lado de su amor. Los restos de los enamorados fueron enterrados en la Iglesia de San Pedro, en una de las capillas.
Durante unas obras en 1555 en dicha iglesia, aparecieron los restos de dos personas enterradas juntas, y fueron inmediatamente considerados los restos de los enamorados. Pero no fue hasta que apareció un documento del siglo XIV cuando se confirmo lo sucedido y la identidad de los dos cuerpos encontrados.
Actualmente, los cuerpos de los Amantes de Teruel descansa en las instalaciones museística y de interpretación adjuntadas a la Iglesia de San Pedro, en el que se estudia el contexto cultural y social de esta trágica historia. Esta historia ha inspirado a miles de artística, escritores como Juan Eugenio Hartzanbuch o Tirso de Molina, al pintor Muñoz Defraín o al músico Tomás Bretón.
Si os interesa esta historia de amor, podréis visitar el mausoleo, la torre mudéjar y la Iglesia, además se realiza distintas actividades y talleres de animaciones especiales para los niños.