El Palacio de Viana, es uno de los principales atractivos turísticos de la capital cordobesa, declarado como Jardín Artístico y Monumento histórico – artístico nacional. La particularidad que le da su docena de patios, provoca que se le llame el Museo de los Patios.
Cinco siglos forman la historia de Viana. Donde los patios han sido los protagonistas indiscutibles de esta construcción, que ha ido creciendo de forma progresiva, por las reformas y ampliaciones a través del tiempo. Una casa viva, que hasta finales de siglo XX estuvo habitada por nobles, de gran estilo popular.
Una casa nobiliaria con mucha historia y tener la posibilidad de descubrir el progreso de las artes decorativas, estilos arquitectónicos y ambientes vinculados con la aristocracia. Adentrarse en su interior es viajar a otras épocas, descubrir la evolución en sus maneras de vida, en el papel que desempeño esta clase social y en sus gustos a lo largo de la historia. Sus gustos estéticos y sus costumbres, han quedado reflejado en las colecciones artísticas del palacio: azulejos heráldicos, guadamecíes y cueros, tapices, arcabuces reales, porcelanas, pinturas, piezas arqueológicas y muebles de distintos estilos. Todo ello repartido en dos platas, que muestran un conjunto hermoso e impresionante al visitante.
La colección de bienes muebles que se encuentra en el palacio es bastante variada, por su origen, ya que se nutre del patrimonio familiar de nobles, como los Saavedra y los Villaseca.
El patio, heredero de la tradición árabe y romana, tiene en Viana una de sus mejores representaciones históricas, desde el patio vecinal de origen medieval, muestra de la arquitectura medieval, a los patios de estilo renacentista como representación del linaje y el poderío.
En el Palacio de Viana, podrás realizar un recorrido sensorial e histórico por los patios cordobeses, sin moverte del mismo edificio.
Palacio hay muchos, pero te aseguramos que ninguno como el de Viana, Porque detrás de sus blancas paredes, salpicas de espacios abiertos que dejan ver su interior, se encuentra un edificio muy especial, dedicado a los patios, esos lugares convertidos en jardines, donde se rinde un homenaje al agua, las flores, la luz y las plantas. En los patios del Palacio de Viana, el arte se materializa en estos espacios, una experiencia donde toman el mando los sentidos.