En el casco urbano de Lleida encontrareis espacios naturales insuperables, por su importancia ecológica y su extensión.
El Parque del Río
Si paseáis por la avenida paralela, a la orilla derecha del río Segre, observareis la portada noble de la capital: el Casino, el edificio de Montepío, el Museo Jaume Morera, la facha del edificio Pa les y la de estilo neoclásico de la Paeria y la Casa Melcior.
Els Camps Elisis
Las instalaciones públicas guardan importantes construcciones como el templete de la música y el café chalet, dos edificios del novecientos y el acuario, que es una construcción modernista, adornada con vigas grabadas y baldosas con cristales. En los jardines también destacan diferentes esculturas.
La Huerta
Al llegar a la ciudad, con el contorno de la Seu Vella (el monumento más importante de la ciudad), al fondo, podréis contemplar la huerta leridana, la banda verde que limita la ciudad.
La huerta leridana, no ha perdido ni mucho menos su identidad, conserva sus características de payesía, y ha sabido adaptarse de manera espectacular a las condiciones de la vida actual.
La Mitjana
Es un gran espacio natural sorpréndete que se extiende por las limitaciones de la ciudad. Es un área húmeda, de clase fluvial con una extensión aproximada de noventa hectáreas, declarada como Área de Interés Natural en 1979.
El elemento más característico de la zona es el agua. El microclima del área ha beneficiado el crecimiento de un espeso bosque: álamos, chopos, fresnos, alisos, sauces, zarzas, tamariscos, cañizo, juncos y lirios amarillos, forman la flora.
La fauna es otro punto característico de la zona. Se pueden contemplar fácilmente varias especies de pájaros. En las áreas con aguas se pueden contemplar: la polla o gallinita de agua, el pato de cuello verde, el martín blanco, la garza cenicienta y la gaviota. La zona es sobrevolada por distintas carroñeras: el águila pescadora, el aguilucho o la arpella.
Reptiles y anfibios tienen su representación en el sapo y la rana verde, y la serpiente escorpionera.
También, hallareis peces como el lucio de río y el barbo, y mamíferos como el zorro o el jabalí.
Así, que la Mitjana es perfecta para observar la flora y la fauna, practicar deporte o simplemente pasear.