Le proponemos una visita fuera de lo común al Cementerio modernista de Lloret de Mar, donde se funde religiosidad y modernismo, una muestra de la sensibilidad de arquitectos y escultores pertenecientes a esta corriente arquitectónica.
Hace más de 50 años que los años de piedra vigilan las ánimas del viejo Cementerio de Lloret de Mar, están tranquilos para dejarse contemplar como si estuvieran en un museo. Este sagrado lugar, fue diseñado por Joaquín Artau, a finales del siglo diecinueve, se inauguró el día de los difuntos de 1901 no es una visita nada lúgubre o tétrica. Al contrario, conocerá una visión modernista del arte funerario al estilo catalán de comienzos del siglo XX.
Aproximase a la entrada majestuosa de la Avenida Principal, al fondo de la misma se halla la iglesia. A cada lado, se levantan sepulcros y panteones espectaculares. Delante de cada uno, existen paneles donde explican en distintos idiomas del nombre del autor, año en que fueron construidas y otros detalles. En algunos, además se muestran una réplica de los planos originales, que se guardan en el Archivo municipal.
Escultores y arquitectos famosos como Cadafalch. Vicenç Artistas, Josep Puig, Bonaventura conill, M. Gallissà, Isamel Smith o Eusebi Arnau fueron los encargados de crear en piedra los panteones y tumbas, más de una treintena de joyas de estilo modernista, con el propósito de superar a la muerte.
La razón porque Lloret de Mar, cuenta con un cementerio de este estilo, responde a las inmensas fortunas de finales del pasado siglo que financiaron su edificación. Ocurre que entre la población había indianos que consiguieron fortuna en América y que volvieron ricos a su pueblo de nacimiento. Ahí se edificaban una vivienda de lujo y una tumba a su altura, dos propiedades que mostraban su riqueza tanto en la vida como en la muerte.
El cementerio de localiza en el Camí de repós en la Carretera de Blanes, a doscientos metros de St. Quirze.
De los meses de abril a octubre permanece abierto cada día de ocho de la mañana a ocho de la tarde, en cambio de los meses de noviembre a marzo tiene un horario cada día de ocho de la mañana a seis de la tarde.