La Villa de Medinaceli, cuyo casco histórico esta declarado Conjunto histórico – artístico, en ella conviven su pasado, presente y actual. Es una localidad que ha mantenido, su encanto de villa medieval. Su origen, se ubica en un poblado primitivo celtibérico, que fue conquistada por los musulmanes que le dieron la denominación de Medina Slim.
Esta localidad del sur de la provincia de Soria, tiene un patrimonio natural reconocido que es digno de visitar. Podrás disfrutar diversos espacios naturales, como por ejemplo el nacimiento del Jalón.
Arco romano
En España es el único arco romano con triple arquería que se conserva en todo el país. Tiene el estilo del arco de Trajano y tiene una decoración muy sencilla, pero efectiva. Es un ejemplo único de arco romano de triunfo monumental.
Además, tenía una situación conmemorativa, de puerta de entrada a Medinaceli. El arco central era paso de animales y carruajes, y los peatones pasaban por los laterales.
Convento
El Convento de Santa Isabel que data del siglo XVI, se mantiene en perfecto estado de conservación, junto a la Iglesia de San Martín.
Este convento de la orden de las clarisas, es el único que continua activo de los cuatro que había en el pasado en la Villa.
Palacio Ducal
Palacio de estilo renacentista, fue edificado en el siglo XVI como la sede de la Casa de Medinaceli, en la fachada se encuentran los escudos. Durante el siglo XIX no fue usado y se deterioró hasta su práctica ruina, estado en el que se mantuvo durante años hasta que terminaron parcialmente las labores de restauración comenzadas a finales de la década de los noventa.
A finales de 2008 se inauguró un museo para exposiciones culturales que consta de diez salas que ocupa totalmente la planta baja del viejo palacio.
Plaza Mayor
Se sitúa en el espacio que ocupaba el viejo foro romano, tiene una gran amplitud, de aproximadamente cinco mil metros, tiene un estado de conservación perfecto y es testigo de la vida diaria de Medinaceli.
En Medinaceli y sus proximidades, podrás encontrar vestigios romanos, árabes y cristianos.
Aunque, se desconoce el lugar exacto, se dice que en estas tierras descansa Almanzor, el temido y poderoso caudillo del país en la época musulmana, después de ser derrotado en Calatañazor.